Mi intención
no es aburrir al personal, pero sí que me apetece, sin
entrar en muchas disquisiciones complejas, explicar
algunas cosas que afectan a la parte técnica de las
motos de competición y contribuir un poco a que aquellas
personas que no entienden algunas cosas cuando se
comentan en las carreras cuenten con algunas nociones
básicas que ayudan a comprender, sobre todo, porque
ocurren algunas cosas.
En esta
ocasión nos vamos a centrar en un “palabro”, tantas
veces oído como tantas veces incomprendido; el famoso “Chattering”.
Hemos escuchado en muchas ocasiones a un piloto decir
que “empezó a notar Chattering y que por eso no pudo
pelear”.
Para empezar y
quizá nos ayude mucho a comprender que es esto, hay que
decir que Chattering es una palabra inglesa que proviene
de chatter, la cual en castellano viene a significar
algo así como “castañeo”. Esto creo que ya nos da una
pista de por dónde van los tiros.
Contrariamente
a lo que se cree, el Chattering no es sólo un problema
de neumáticos aunque tiene que ver en parte con ellos.
Ese castañeo es en realidad una vibración que se produce
en el momento de la frenada y a la entrada de la curva.
La conjunción de frenada e inicio de inclinación es lo
que genera el Chattering.
¿Por qué se
produce esa vibración? La vibración se produce como
consecuencia de una onda de resonancia en los
componentes de la amortiguación y el freno. Al mismo
tiempo, el neumático también genera una resonancia que
se traduce en vibración por el esfuerzo de la carcasa
del neumático que soporta el esfuerzo del hundimiento de
la horquilla así como la acción del freno que tira,
imperceptiblemente, pero tira de la horquilla hacia
atrás. Las dos resonancias son independientes y la
diferencia entre las dos es el Chattering.
Siendo como son
dos resonancias distintas, con ondas distintas se
produce un efecto de vibración que es el que nota el
piloto. Los mortales seguro que pasamos nuestra vida de
moteros sin notarlo sobre todo en carretera, pero esa
vibración que siente el piloto es la que le produce la
sensación de no estar controlando el eje delantero y
pensar que está corriendo el riesgo de caída por no
controlarlo.
El problema
de Chattering no es reciente pero si que se acusa mucho
más en los últimos tiempos por la evolución de los
neumáticos, ya que estos tienen carcasas mucho más
robustas para evitar deformaciones excesivas. Hay que
apuntar que el neumático también cumple funciones
amortiguadoras deformándose.
¿Se puede
corregir? Hoy por hoy es prácticamente imposible. Para
ello los dos bloques, amortiguación con freno y
neumáticos deberían producir exactamente la misma
vibración, lo cual es casi imposible porque cada
circuito, cada curva, cada bache, cada asfalto es
diferente. Al final, lo único que se puede hacer es
intentar minimizarlo pero corregirlo o eliminarlo del
todo no. |