¡¡¡ BALANCE  !!!

Como es conocido por todos, se ha clausurado la Exposición Homenaje a Manolo Cachorro. La clausura creo que ha estado a la altura de la propia Exposición, con una cena Homenaje con más de 80 personas que quisieron arropar a la familia y mostrar su respeto y cariño por la propia familia y por la exposición.

Humildemente creo que la Exposición ha sido un éxito. Una Exposición que no ha contado con apoyo externo alguno, que ha salido adelante sólo con el esfuerzo de los que han participado en ella bien organizando, bien colaborando en el montaje y desmontaje, bien aportando motos de gran valor y esfuerzo de llevar y traer y con la colaboración del Hotel Doña Brígida que nos proporcionó el lugar y nos trataron fenomenalmente bien.

Ahondar en las razones por las cuales este Homenaje era una asignatura pendiente con Manolo Cachorro creo que huelga en este momento. Tanto en la inauguración, como en la clausura, así como en los reportajes de prensa escrita, radio y televisión se ha hablado suficientemente de esta cuestión, reflejando la importancia de la figura de Manolo Cachorro en el motociclismo salmantino.

Como decía anteriormente, la Exposición no puede calificarse de otra forma que no sea de éxito. Éxito de repercusión mediática, éxito de asistencia, éxito de participación y lo más importante que era el objetivo, éxito de cara a la familia de Cachorro. Una exposición realizada sin ayuda externa e incluso, por qué no decirlo, con alguna “zancadilla” incluida por parte de alguna institución que no veía con buenos ojos que una especie de advenedizos indocumentados hubiesen tenido esta iniciativa y además hubiesen sido capaces de llevarla adelante. Se ha hecho una cosa muy digna, muy representativa, con mucho cariño y dedicación y el resultado ha sido del agrado de todos. Hay que tener en cuenta que nunca habíamos hecho nada parecido y la inexperiencia podría tener sus consecuencias, pero gracias a todos ha salido bien.

Fruto de esa inexperiencia, por ejemplo, ha sido no llevar un control de asistencia, no por una razón estadística ni porque tengamos que justificar ningún tipo de subvención o ayuda, sino por saber realmente el alcance de lo hecho. Ciertamente en la exposición siempre ha habido gente y por tanto asistentes pero hubiese sido interesante.

Nos ha llamado la atención muchos asistentes de edades avanzadas. Esto, que podría parecer de Perogrullo por pensar que son jubilados y con mucho tiempo libre no es de aplicación porque había que desplazarse hasta Doña Brígida, es decir, que no es lo mismo que estar viendo una obra mientras uno se pasea. Nos ha hecho especial ilusión porque comentaban las fotos expuestas como si estuviesen allí, reconociendo a unos y a otros, viéndose ellos mismos, comentando anécdotas sobre las carreras que se celebraban en nuestro casco urbano. Ha sido muy emotivo.

Nos ha llamado también mucho la atención el conocimiento general que hay sobre las motos históricas expuestas. Hemos visto que hay un cariño especial hacia ellas y que a casi todos los que han participado les gustaría tener alguna de la que disfrutar. Hay una vuelta al pasado en todo esto y prueba de ello es que todas las marcas tienen en su catálogo algún modelo “vintage”.

Sin embargo, no nos ha llamado la atención lo que le gusta a la gente hablar de motos. La visita, en muchas ocasiones, ha finalizado con una conversación muy distendida, amigable y en ocasiones técnica sobre las motos expuestas y sobre la moto en general.

Lo que sí me ha llamado poderosamente la atención es la ausencia de muchos. Muchos “moteros” de nuestra ciudad y provincia, que en algunos casos además, coinciden con ser de los más reivindicativos cuando se trata de que otros organicen cosas para que ellos participen. La ventaja y al mismo tiempo desventaja es que nuestra ciudad y nuestra “comunidad motera” es pequeña e identificable y por tanto, a pesar de no llevar registro alguno es muy fácil hacer aquí y ahora una lista de los que no se han molestado en acercarse hasta la Exposición. 

Es muy deprimente ver cómo ha venido gente de fuera, de Cáceres, de Valladolid, de Zamora, de Ávila de Portugal e incluso de Barcelona y gente de Salamanca ni se ha tomado la molestia de perder una hora en admirar verdaderas joyas sobre ruedas y de mostrar sus respetos por la figura de Manolo Cachorro. Gente muy experta ha calificado la Exposición como una de las mejores que han visitado fuera de una Exposición Permanente de un museo.

Salamanca es como es, y el salmantino es como es. No voy a descubrir América a estas alturas. Nosotros no hacemos cosas para mayor gloria propia, ni para que todo el mundo nos regale los oídos, ni para figurar y por supuesto mucho menos para sacar algún tipo de partido porque lo que pasa es que nos cuesta dinero. La cena costó 30 € y 30 € se cobró. Lo demás ha salido de nuestros bolsillos. Ciertamente muchos creen que es por esas cosas y normalmente los que lo piensan son aquellos que son incapaces de hacer nada por los demás pero que al mismo tiempo son los que critican porque sí, los que siempre ponen pegas a todo, los que hacen bandera de la crítica para tener algo de lo que hablar. Son los mismos que además de hacer eso no asisten a nada.

Uno tiene que asistir a las cosas que se organizan por múltiples razones; Porque apetece, porque tiene que ver con lo que nos gusta, porque el objetivo es noble y sincero, porque lo organizan compañeros, porque es algo distinto, porque quiero criticarlo y para eso tengo que verlo, por muchísimas razones. Todo eso tiene que estar por encima de si el que lo organiza o participa me cae mejor o peor, porque hay un objetivo final.

Como decía antes, ha sido un éxito pero sinceramente he echado de menos a muchas personas que tienen que ver con nuestro mundo “moteril” La verdad es que al final ellos se lo han perdido y difícilmente podrán volver a verlo. Los nombres y apellidos de aquellos que “han pasado”, en mi caso, también han pasado a mi cajón del olvido. Allá ellos. Nosotros hemos disfrutado haciéndolo y hemos disfrutado disfrutando de los que han disfrutado. ¿Lo demás? Se llama examen de conciencia.