Llevábamos ya mucho tiempo sin incluir una de nuestras crónicas de las cenas de Veteranos Moteros, llamadas así como hemos dicho en muchas ocasiones por los años y por la experiencia de muchos de los asistentes.

Como ya muchos saben, en estas cenas participamos algunos de los que administramos la web. Moteros de Salamanca y siempre hemos intentado aportar un tema a la cena con el fin de amenizar más el encuentro. testimonio que queda plasmado en el reportaje que siempre acompañamos.

Ciertamente entre la cena dedicada a los toros y la que ahora celebraban nuestros amigos, se realizó una cena en la que homenajeamos de algún modo a nuestro queridísimo "Manolo el Psicólogo" que nos había dejado recientemente y que nunca falto a estos encuentros, por ello nos reservamos la intimidad de aquella cena y no incluimos reportaje ni crónica alguna.

Pero el tiempo pasa y de nuevo los Moteros Veteranos se reúnen en una cena con menos participantes, Chuchi, Tomás, Domingo, Manolo, Isaac, y Javier. echamos de menos a Maxi, Juanjo, JuanPedro, Paco, Luigi, o Antonio, incondicionales también de estos encuentros, pero que en esta ocasión no pudieron asistir.

Habíamos elegido un tema para acompañar a esta cena, que no es otro que el que muestra el cartel la música de los años 60 donde los Beatles se convertían en los Veterans Motorists. pero que en el transcurso de la cena el estilo fue cambiando debido a la indumentaria que cogimos por allí, un sombrero guarripei que no sabríamos donde encasillarlo, si en el cartel colombiano o en el vasto oeste, con lo que el grupo de Liverpool acabó transformándose en los creedence clearwater revival de la época.

primando el coutry por encima de los demás etilos. aunque de no haber elegido la música el perfil de los asistentes se acercaba más al entorne de Billy el Niño y su banda de foragidos.

La cena corrió a cargo de Chuchi, profesional pulpero gallego, que con la cebolla y las patatas nos preparó un pulpo a la gallega par chuparse los dedos, ibéricos de nuestra tierra, un reserva de Rioja de las bodega de Ysios y los magníficos gin-tónic preparados por Javier, el humo de la chimenea, el otro humo que no sabemos de que era, el caso es que fue pasando la noche, risas y recuerdos de un grupo de Motoristas que ahora que las cosas están más complicadas, ha llegado el momento de estar más unidos  y a los que tal vez la edad y la experiencia, les dice que la amistad está entre los primeros valores del ser humano, que hay que disfrutar lo más sencillo y es ahí donde se demuestra la verdadera veteranía.

Os lo ha contado: J.C. Moteros de Salamanca

Y la tradición de romper una silla en cada cena

y todas las antigüedades que te puedas encontrar en la bodega de Chuchi

Así son las cenas de veteranos y así os la hemos contado